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Carlos Gardel

Esta es la historia de un tanguero uruguayo naturalizado argentino. Fue cantante, compositor y actor de cine argentino. Es considerado el más grande tanguero del siglo XX.


Infancia
Nació el 11 de diciembre de 1887, según algunos investigadores, en Toulouse (Francia) y, según otros, en Tacuarembó (Uruguay).


Vivió en Buenos Aires (Argentina) desde 1893 en un inquilinato de la calle Uruguay 162. Gardel creció en el Abasto. Desde muy pequeño comenzó a crecer su fama siendo conocido como "El Morocho del Abasto". El payador José Betinotti le dio un nuevo apodo ("El Zorzal Criollo") y lo motivó a cantar en los centros políticos. 


Primeros pasos
Gardel trabajó como tramoyista en el Teatro de la Victoria, donde escuchó al zarzuelista español Sagi Barba. En 1902 pasó al teatro de la Ópera, donde conoció al barítono italiano Titta Ruffo.


En 1911 celebró un duelo musical con 'El Oriental' José Razzano en la calle Guardia Vieja del barrio del Abasto. En ese duelo no ganó ninguno de los dos: más bien surgió el dúo Gardel-Razzano, que trabajó unido durante quince años. Poco tiempo después Gardel grabaría sus primeros discos, marca Columbia Record, para la Casa Tagini.


Su interés y sus aptitudes lo inclinan hacia el tango, escasamente cultivado hasta ese momento. En efecto, el tango estaba por entonces culminando su proceso evolutivo que lo había llevado de ser una música alegre  que se bailaba de forma un tanto procaz en las fiestas de las clases populares de Buenos Aires, a convertirse en un lamento cantado, una música nostálgica y desgarrada que los porteños acomodados habían aprendido a admirar y a bailar y que Gardel estaba destinado a dar a conocer en todo el mundo.


Salto a la fama
En 1915 forma pareja con José Razzano, intérprete de tangos que ya goza de alguna fama. Ninguno de los dos sospechaba que en pocos años iban a convertirse en ídolos tanto de los entendidos como de un amplio sector de público. Fue a raíz de una apoteósica actuación en el teatro Esmeralda de Buenos Aires, en 1917, cuando el personal estilo de interpretar el tango de Carlos Gardel caló hondo en el público porteño y dio al dúo Gardel-Razzano una fulminante celebridad.

El tándem se mantendrá hasta 1925, año en que Gardel debió partir solo hacia Europa. José Razzano, aquejado de una enfermedad en la garganta, había decidido abandonar el canto. Esta desgracia de su compañero significará, no obstante, la fama internacional para Gardel. Tres años después de cruzar el Atlántico, escribe a Razzano: "La venta de mis discos en París es fantástica; en tres meses se han vendido setenta mil". Bing Crosby, Charles Chaplin y Enrico Caruso se deleitan con canciones como "Mi noche triste", "Volver" o "No habrá más penas ni olvido".

Si grande había sido el éxito de Gardel en París, no lo fue menos en España. Gardel debutó en solitario en 1925 en el teatro Apolo de Madrid y en el teatro Goya de Barcelona el 5 de noviembre de ese mismo año. Tal fue el recibimiento y cariño que el público le brindó en la capital catalana al "zorzal criollo", como también se lo llamaba, que hizo de ella su centro de operaciones para sus giras europeas, no obstante sus largas estancias en París. En "Che, papusa, oí" canta Gardel: "Trajeada de bacana, bailás con corte / y por raro esnobismo tomás prissé", acaso evocando las fiestas al estilo parisino que ofrecía por esa época la aristocracia barcelonesa, con esmoquin, champán francés y cocaína o plis o plissé, como llamaban a esta droga.


La voz, la estampa y la simpatía de Gardel arrollaban, especialmente entre las mujeres. Reveladora es la entrevista "a la sombra de Gardel", que salió publicada en Tango Moda, en 1929. La sombra era una bella francesa que seguía al ídolo por todas partes después de haberlo visto actuar una vez en el cabaret de Florida de París. "Cuando por la noche me retiro a mi cuarto del hotel, doy por muy bien pagados mis esfuerzos si le he oído cantar tres o cuatro canciones", confesaba esta admiradora incondicional. Sus películas, como Flor de durazno, rodada en Argentina en 1917, Luces de Buenos AiresCuesta abajo, en Francia en 1931 y 1934, y Tango Bar, en Estados Unidos en 1935, además de Melodía de arrabalEl tango en BroadwayEl día que me quierasCazadores de estrellas, entre otras, contribuyeron a incrementar su fama, gracias a su magnífica voz y a su fascinante personalidad.

Su forma de cantar los pequeños dramas existenciales de sus tangos va a significar una revolución. Nadie es capaz de imitar el fraseo de Gardel ni su habilidad para metamorfosearse en los personajes de sus canciones. Además, su figura simpática, mezcla de pícaro y castigador siempre bien vestido y repeinado, se convierte en un modelo para los porteños. Ahora es un triunfador nato, modelo de "el que llegó", un mito rioplatense admirado por los hombres y adorado por las mujeres.
A pesar de esta imagen, Gardel fue en la intimidad un hombre tortuoso, retraído y contemplativo, atenazado por una oscura tristeza y víctima fácil del abatimiento. En cuanto a su vida sentimental, confesaría que nunca se había enamorado de mujer alguna, "porque todas valen la pena de enamorarse y darle la exclusividad a una es hacerle una ofensa a las otras".


En 1934, después de haberse paseado por escenarios de Europa y Estados Unidos, Carlos Gardel inició una gira por toda Hispanoamérica provocando el delirio. Los teatros se llenaban de un público rendido al cantante argentino, que lo aclamaba y lo continuaría aclamando hasta después de su muerte. 


Muerte
El 24 de junio de 1935 por la mañana, Gardel en compañía de Le Pera y sus músicos salieron de Bogotá rumbo a Cali, pero hacieron una escala técnica en el aeropuerto Olaya Herrera de Medellin, conocido como Las Palmas. 
El objetivo de la escala fue cargar combustible y los rollos de la película “payasadas de la vida”. El avión además llevaba instrumentos musicales, telones y valijas de los 13 ocupantes. A las tres de la tarde, el Ford F-31 de la empresa Saco, carreteó el aeropuerto y se estrelló aún en tierra con el Ford F-11 de Scadta.



De los trece tripulantes sobrevivieron el profesor de inglés José Plaja, el ayudante de cabina Grant Flynn y el guitarrista José María Aguilar. 


El velatorio (Medellín, Colombia; 1935).
Cinco grandes éxitos de Gardel
"Por una cabeza" (original)

"Melodía de Arrabal" (original)

"Volver" (original; video incluido)

"Rubias de Nueva York" (original; video incluido)

"El día que me quieras" (original)







Ernesto "Che" Guevara


Esta es la historia de un argentino-cubano revolucionario iberoamericano. Fue político, escritor, periodista y médico. Como médico, era experto tratando a los leprosos. Defendió los derechos humanos y se unió a Fidel Castro por la libertad de los oprimidos. 


Infancia
Ernesto Guevara a la edad de 17 años (1945).
Ernesto "Che" Guevara nació en Rosario (Argentina) en 1928. Se crió en una familia acomodada y, ya siendo un adulto pero aún así joven, estudió medicina.


Primer viaje al norte argentino
En 1950 realizó su primer viaje sólo, junto a su bicicleta con motor marca "Cucchiulo" y visitando a su amigo Alberto Granado que se encontraba en Córdoba Capital. Luego, continuó con su viaje pasando por las provincias más pobres del país: Santiago del EsteroTucumánSaltaJujuyCatamarcaLa Rioja, y volver por San JuanMendozaSan Luis. En total recorrió 4.500 kilómetros. 
   
 En su cuaderno de viaje, el "Che" escribió la siguiente reflexión:
"Por lo menos no me nutro con las mismas formas que los turistas y me extraña ver en los mapas de propaganda de Jujuy, por ejemplo: el Altar de la Patria, la catedral donde se bendijo la enseña patria, la joya del púlpito y la milagrosa virgencita de Río Blanco y Pompeya... No, no se conoce así un pueblo, una forma y una interpretación de la vida, aquello es la lujosa cubierta, pero su alma está reflejada en los enfermos de los hospitales, los asilados en la comisaría o el peatón ansioso con quien se intima, mientras el Río Grande muestra su crecido cauce turbulento por debajo."



Terminada la aventura, la empresa fabricante del motor de la bicicleta le ofreció ser parte de un aviso publicitario en la revista "El Gráfico", en la que él figuró junto a su bicicleta.


Los dos viajes por Latinoamérica
En 1952, comenzó su primer viaje por el continente, sin objeto alguno y junto a su amigo Alberto Granado. Partieron desde San Francisco (Córdoba) en la moto de Alberto, a la que se la conocía como "La Poderosa II". Pasaron por Buenos Aires, Miramar, Bariloche y entraron a Chile por el Lago Esmeralda. En chile, recorrieron Osorno, Valdivia, Tamuco y Santiago, donde abandonaron la moto ya que no contaba con las condiciones para seguir siendo usada. Luego llegaron a Valparaíso, donde viajaron en un buque que se dirigía a Antofagasta. Desde allí continuaron su viaje a pié, dirigiéndose a Lima, San Pablo, Leticia (Colombia), Bogotá, Caracas (Venezuela), Miami (USA) y finalmente volviendo a Buenos Aires.


En 1953 realizó su segundo viaje por Latinoamérica junto a otro amigo llamado Carlos Ferrer. El objetivo de éste era llegar a Caracas, donde los esperaba Alberto Granado. Ellos pensaban quedarse a vivir allí durante aproximadamente diez años. Sin embargo, no pudieron cumplir con ese objetivo, ya que, estando en Guayaquil, Ernesto decidió ir a Guatemala para ver la revolución que estaba siendo liderada por Jacobo Arbenz. Fue allí en donde ambos se separaron; Carlos se dirigió a Caracas.


Luego de los viajes
Guevara junto a Fidel Castro.
Vivió en Guatemala durante 9 meses. En 1954 se dirigió a México, en donde conoció a Fidel Castro y a su hermano Raúl, que preparaban una expedición revolucionaria a Cuba. Guevara trabó amistad con los Castro, se unió al grupo como médico y desembarcó con ellos en Cuba en 1956. Instalada la guerrilla en Sierra Maestra, Guevara se convirtió en lugarteniente de Castro y mandó una de las dos columnas que salieron de las montañas orientales hacia el Oeste para conquistar la isla. Participó en la decisiva batalla por la toma de Santa Clara (1958) y finalmente entró en La Habana en 1959, poniendo fin a la dictadura de Batista.



El nuevo régimen revolucionario concedió a Guevara la nacionalidad cubana y le nombró jefe de la Milicia y director del Instituto de Reforma Agraria (1959), luego presidente del Banco Nacional y ministro de Economía (1960) y, finalmente, ministro de Industria (1961). Buscando un camino para la independencia real de Cuba, se esforzó por la industrialización del país, ligándolo a la ayuda de la Unión Soviética, una vez fracasado el intento de invasión de la isla por Estados Unidos y clarificado el carácter socialista de la revolución cubana (1961). En aquellos años, Guevara representó a Cuba en varios foros internacionales, en los que denunció frontalmente el imperialismo norteamericano.

Su inquietud de revolucionario profesional, sin embargo, le hizo abandonar Cuba en secreto en 1965 y marchar al Congo, donde luchó en apoyo del movimiento revolucionario en marcha, convencido de que sólo la acción insurreccional armada era eficaz contra el imperialismo. Relevado ya de sus cargos en el Estado cubano, el Che Guevara volvió a Iberoamérica en 1966 para lanzar una revolución que esperaba fuera de ámbito continental: valorando la posición estratégica de Bolivia, eligió aquel país como centro de operaciones para instalar una guerrilla que pudiera irradiar su influencia hacia Argentina, Chile, Perú, Brasil y Paraguay.

Al frente de un pequeño grupo intentó poner en práctica su teoría, según la cual no era necesario esperar a que las condiciones sociales produjeran una insurrección popular, sino que podía ser la propia acción armada la que creara las condiciones para que se desencadenara un movimiento revolucionario(Guerra de guerrillas, 1960; Recuerdos de la guerra revolucionaria, 1963).
Sin embargo, su acción no prendió en las masas bolivianas; por el contrario, aislado en una región selvática en donde padeció la agudización de su dolencia asmática, fue delatado por campesinos locales y cayó en una emboscada del ejército boliviano en la región de Valle Grande, donde fue herido y apresado.

Dado que el Che se había convertido en un símbolo para los jóvenes de todo el mundo, los militares bolivianos, aconsejados por la CIA, quisieron destruir el mito revolucionario, asesinándolo para después exponer su cadáver, fotografiarse con él y enterrarlo en secreto. Se salvó, sin embargo, su Diario de campaña, publicado en 1967.
En 1997 los restos del Che Guevara fueron localizados, exhumados y trasladados a Cuba, donde fueron enterrados con todos los honores por el régimen de Fidel Castro.

Fotos
Poco después de su nacimiento (1928).
A la edad de 12 años (1940).




Junto a Alberto Granado, en Perú (1952).
En la preparación militar (1955).
En la cárcel de México (1956).
En la guerrilla, con Fidel (1957).


El "Che" y Fidel (1959).


Pescando (1960).


Con sus hijos (1963).






En Bolivia (1967).
El "Che", asesinado (1967).